El instrumento perfecto para despertar y potenciar el afecto, la confianza y el instinto de cuidado. Desempeñan el papel de un ser querido tanto en el juego simbólico como en terapia.
Tienen cuerpo y cara reales, teniendo especial importancia las características faciales y los ojos. Parece que hay un contacto visual constante entre el muñeco y la persona. Esta peculiaridad sirve para desarrollar un vínculo emocional, que es un requisito previo importante para el aprendizaje de las habilidades sociales.
Representan a un niño de 3 a 6 años de edad. El lenguaje corporal es muy natural, porque pueden sentarse, con las piernas rectas e incluso caminar. Sus proporciones están diseñadas para que también se le pueda poner ropa de niño de esa edad.
Dimensiones: alrededor de 65 cm.
Material: el cuerpo está hecho de material elástico y blando, fácil de cuidar y que no daña la piel, se puede lavar a mano hasta 30°C.
El diseño de la ropa puede cambiar.